domingo, 24 de agosto de 2014

El VIH Sida y los awajún: la batalla moderna de las grandes preguntas

Un medio televisivo reveló a noche el azote de la epidemia del VIH Sida a las comunidades indígenas awajún de la Provincia de Condorcanqui. El hecho es altamente preocupante porque tal como lo señalan los pocos médicos que trabajan en la zona, estaríamos asistiendo a una extinción paulatina de jóvenes y pobladores entre los 14 y 25 años.

Las causas son muchas, y las medidas para contrarrestar los alarmantes datos  deben pasar por una agresiva campaña de información así como con la dotación de retrovirales y medicamentos a los pacientes infectados. Sin embargo, el asunto es un llamado de atención en altavoz a los líderes y representantes indígenas y acaso a la necesidad de replantear el esquema tradicional de sus relaciones.

Los últimos 50 años  los Pueblos Indígenas han emprendido un proceso de emancipación basado en la exigencia por la seguridad territorial, el respeto a la identidad y a su educación bilingüe intercultural; su derecho a la participación política y a la trascendencia de la consulta previa en relación a medidas que deslegitimen sus facultades. Gran parte de tales requerimientos son una realidad actualmente.  No obstante, los logros de dicho proceso difícilmente son una respuesta razonable ante las grandes preguntas de nuestro tiempo.

Los problemas actuales pasan por 4 grandes ejes centrales; y estos son los siguientes: 1) La importancia de una educación basada en la tecnología y enfocada en los negocios, 2) La salud ante las nuevas enfermedades, 3) El problema de la infraestructura para hacer más fácil y equitativo el comercio local, y 4) La necesidad de abrir fuentes de empleo para dar trabajo a la nueva generación.

Una de las quejas recurrentes de las empresas que operan en lugares cercanas a las comunidades es que no saben exactamente con quién dialogar. Si bien los indígenas tienen presidentes de sus instituciones representativas, la necesidad de ese diálogo exigida por el sector privado no está dirigida hacia ellos. El diálogo empresa-comunidad solicita que la comunidad cuente con profesionales capacitados en el mundo de las empresas.

No tenemos registro de cuántos indígenas estudian carreras afines, sin embargo, es previsible que esto pueda ser mucho menor de lo que podría esperarse. Esta información es altamente preocupante, ya que pone en juego el futuro no tanto de los proyectos sino el desarrollo sostenible y sustentable de las comunidades indígenas.

No solo el VIH es un grave problema que involucra a estas poblaciones. La desnutrición crónica, el incremento de infecciones estomacales y también las enfermedades que matan en silencio como la enfermedad de la depresión y su consecuente suicidio.

Hace unos meses salió un estudio hecho por UNICEF sobre las causas de ese acto entre las jóvenes indígenas awajún del río Cenepa, en Condorcanqui;  jóvenes guaraníes de Brasil  y miembros de la tribu Emberá de Colombia. Las conclusiones de tal estudio revelaban que la causa  se debía a la discriminación y a la alteración vertiginosa de su entorno. Así mismo a la “(…) desproporcionada presencia de los niños indígenas a las peores formas de trabajo infantil, el desplazamiento forzado y la migración, el fracaso escolar, la violencia y otros desarreglos…”.

Las preguntas de nuestro tiempo  en materia de salud deben considerar también los orígenes de los fallecimientos por los paros cardíacos, la diabetes y los derrames cerebrales, males que aparentemente no existían al interior de los Pueblos Indígenas.

Las comunidades siembran cacao, camu camu, sacha inchi, café, yuca, plátano. Pero el precio que les pagan es mínimo mientras que los esfuerzos que ellos hacen para producirlos son gigantescos.  Las carreteras están en mal estado o simplemente no existen. Los pasajes son bastante elevados. Los medios de comunicación como la telefonía o la internet no llegan en gran parte de las localidades.

El desarrollo de las vías terrestres y fluviales  facilitará el comercio y las comunicaciones basadas en la telefonía y la internet permitirán interconectar a las familias entre sí así como con el resto de la población. Una apuesta  por la producción comercial, pequeña o mediana,  no podrá ser justa sino considera estos aspectos. ¡He ahí su trascendencia!

El éxodo de miembros indígenas a zonas urbanas nos debe conducir a cuestionarnos sobre las fuentes de tal fenómeno. Un análisis somero pero crucial nos dirá que es por la búsqueda de oportunidades económicas. ¿Pero qué tipo de oportunidades económicas? Básicamente  la oportunidad del empleo, el trabajo.

La falta de empleo es el motor principal para la emigración de cientos y miles de jóvenes. Al encontrarse en condiciones precarias para la labor que puedan encontrar, el sueldo y el trabajo que reciben son de los más bajos. No se respetan en muchos casos sus derechos laborales y en oportunidades son sometidos a una vida de semi esclavitud.  Lo que les está sucediendo a los miembros amazónicos  les aconteció a otras comunidades ancestrales de la sierra  o de la costa. Teniendo en cuenta dichas experiencias, ¿no sería ideal que ellos puedan encontrar una oportunidad laboral allí donde nacieron? ¿Será factible crear alguna estrategia para generar empleo in situ? ¿Cómo? ¿Cuándo…? ¿Quiénes podrían hacerlo...?

El VIH Sida asfixiará y matará a buen número de integrantes de la población indígena awajún de Condorcanqui. Pero sus líderes regionales y nacionales están llamados a reformar el esquema actual de relaciones entre ellos mismos y el resto de la sociedad. ¿Estarán en condiciones de hacerlo? Lo cierto es que existe la sensación de que muchas veces el enemigo que ellos denuncian no es tanto un enemigo venido desde tierras lejanas, sino monstruos internos que si no son atendidos con urgencia terminarán por absorberlos en la coyuntura actual.




13 Reglas para un diálogo productivo con los pueblos indígenas

 Entienda que son personas. Por lo tanto, tienen las mismas necesidades que Ud.   Entienda que el español es su segunda lengua. Por ende...